Días atrás dábamos
a conocer la carta de la renuncia de Oscar “Ponono” Quintana a la presidencia
de la Comisión Cooperadora del jardín de la localidad de Moctezuma, donde
señalaba que no estaba de acuerdo con una serie de cuestiones y sobre todo en
el manejo de los fondos que le llegaban a la comisión.
En dicha ocasión
destacábamos que nos había acercado una nota con los por menores de la misma,
donde no se salvaba nadie, ni el Delegado Municipal, ni el Intendente Torchio, ni los Cooperativistas
entre otros, denunciando además aprietes.
Obras para embellecer el pueblo
Quintana en
su misiva señala que: “En el mes de julio la Cooperadora del Jardín N° 904
Roberto José Mouras de Moctezuma cito al Delegado Municipal Carlos Alberto
Graciano para una reunión donde se acordó que el Municipio donaba la pintura
para emprolijar el mismo hacia los festejos del centenario del pueblo. También
se comprometió en hacer otros arreglos que nunca se llevaron a cabo…
La
cooperadora pidió en aquel momento tres presupuestos a pintores locales, (Moctezuma)
uno de $8.000, el siguiente de $6.500 y por ultimo $6.000 para pintar el
exterior y el interior del Jardín. Pero a principios del mes de septiembre el Delegado
nos dice que las cooperativas y el Señor Intendentes se comprometían a pintar
en forma gratuita el Jardín, la Capilla,
el destacamento policial, la plaza, la delegación Municipal y la escuela.
Se comenzó a
pintar y en los primeros días de octubre llegaron estos trabajadores a nuestra
institución, el trabajo no se terminó y no hago culpable a los trabajadores, se
realizó el 20% de lo prometido. Seguramente esa habría sido la orden de
trabajo”.
Paso la fiesta y llegaron los líos
Quintana
prosigue en su carta: “Pasada la fiesta del centenario, llega un cheque de
$22000 del Fondo Educativo y se comunica a la cooperadora que es para el
trabajo realizado en toda la comunidad.
Entonces la
cooperadora se asesora y dice no a este atropello donde se pretendía que
ingresemos esos fondos a la cuenta de la cooperadora. Y demos salida a un
cheque que la misma cifra ($22000) a nombre del municipio.
En los días
que estuvimos consultando como actuar ya que la directora se encontraba de
licencia. Fue allí cuando se apersona en mi domicilio el señor Marcos Rosales
con otros integrantes de las cooperativas en forma brusca y amenazante, donde
también se acercaron al domicilio del tesorero, donde en estas casas se
encontraban las familias de los integrantes de la comisión.
Estos
trabajadores aludieron ser mandados desde el municipio por “Walter”, cosa que
no sabría aseverar que fuera así, ni negarlo tampoco…
Lo que más
me indigna es que los cooperativistas dijeron que el trabajo realizado en
Moctezuma había sido un trabajo en forma particular, donde en Delegado nunca
nos comunicó esto a la comisión; si no, le hubiéramos dado el trabajo a gente
de nuestro pueblo…
Por todos
estos motivos más lo que exprese en la carta de renuncia entregada a los
miembros de la Cooperadora es que presente mi renuncia en forma indeclinable”,
finalizo expresando Oscar Quintana.